Las cosas no están bien en nuestro país, como periodistas tenemos la obligación de indignarnos y señalarlo. No podemos dejar que se nos muera la memoria y que el pasado se nos escurra entre los dedos. No podemos darnos el lujo de usar la memoria de manera selectiva y eliminar los malos recuerdos y magnificar los buenos, pretendiendo así sobrellevar el pasado. El pasado es un perro negro y bravo que nos debería seguir en todo momento pero no debemos matarlo, sino alimentarlo y convivir con él. El pasado es un país extraño que conformamos como queremos. En la serie radiofónica Se Regala Cascajo que se transmitió durante 20 años en Radio Universidad, tuvimos como objetivo central integrar una memoria auditiva del devenir mexicano. La rúbrica de entrada y salida resultaban muy ilustrativas: Nos negábamos al olvido. Era necesario recordar lo que pocos saben y que en este país de pillos, muchos quisieran que se olvidara. Era en la rúbrica de salida donde se hacía énfasis en la premisa mayor del programa: lo único peor que la muerte es olvido. Hoy hemos llegado a la conclusión que el pasado nunca muere, está allí, agazapado, en un rincón de nuestra alma. Debemos usar el pasado como un trampolín y no como un sofá. Nos negamos a olvidar.
Publicado el 21 Junio 2015
Hablemos de la educación. Un tema que nunca debió haber pasado de moda. Vamos a las definiciones, ¿Qué quiere decir educación? La etimología sugiere salir de una condición deplorable gracias a la ayuda de alguien más. Ex ducere, sacar afuera, guiar afuera. Los latinos así concebían el concepto detrás del verbo educar. El prefijo “ex” resulta fundamental para entender el sentido de la palabra porque señala que la educación conlleva un recorrido hacia afuera de algo que está adentro, quizás prisionero, quizás pugnando por salir. ¿Cómo se debe educar? ¿Cuál debe ser el papel del maestro? La respuesta la da uno de los grandes educadores de la historia: Sócrates nos dice que educar debe ser igual a la conducta de la partera.
Sócrates era hijo de una comadrona. Y este pensador transforma la profesión de su madre, el acto materno de hacer nacer niños, en el arte de hacer nacer al hombre sabio. Su método educativo es la mayéutica, o sea el arte de la obstetricia. Educar es una obstetricia filosófica, qué gracias a preguntas y razonamientos sustentados en el diálogo, tratan de extraer del discípulo su percepción del mundo quedo está sepultada por las opiniones y el convencimiento que ha asumido como suyo, sin analizar la verdad y su verdad. El conocimiento, según Sócrates no se puede enseñar, solamente el maestro puede aspirar y esperar que su ayuda permita al alumno que descubra por sí mismo y desentierre su propia percepción y que esto es un estado y condición del alma. Por eso, con la mayéutica, es decir, la comadrona, debe tratar pacientemente de sacar afuera la verdad escondida en el niño recién nacido, es decir el alumno. La actitud del educador debe llevar al parto de la verdad del discípulo, que es verdad solamente porque es suya.
Escuchar programa:
Fecha de Transmisión: 6 de marzo 2013
Dedicado a: Los maestros que con su trabajo engrandecen México
Fuente originaria: Andreella,Fabrizio Ensayo titulado “El naufragio de la cultura”. La Jornada Semanal, número 936, La Jornada el 10 de febrero de 2013
Otras fuentes de interés:
COMUNICADO 140.- MÉXICO Y ALEMANIA FIRMAN MEMORÁNDUM DE ENTENDIMIENTO PARA LA COOPERACIÓN EN FORMACIÓN DUAL
Dudas y reflexiones sobre el modelo de Formación Profesional Dual
El Modelo Dual de la FP Alemana* *formación profesional
Con las voces de: Margarita Castillo, Esteban Escárcega, Juan Guerrero y Guillermo Palacios.
Producción, Realización y Guión: Juan Guerrero.
Asistente de producción: Guillermo Palacios
Grabación y Montaje: Arturo González
